Cooperativas andaluzas participan en un proyecto para reducir la emisión de gases invernaderos en el olivar
25 de octubre de 2011
El objetivo de Citoliva es “medir la emanación de gases de efecto invernadero mediante el control de las emisiones de la industria del olivar”, según ha explicado la ‘Fundación Descubre’, mientras que el proyecto Oilca, que está cofinanciado por los Fondos Europeos de Desarrollo Regional (Feder) a través del programa Interreg IV B Sudoe, pretende “determinar la huella de carbono de la producción, la optimización de la gestión de recursos y los costes derivados de la actividad de la industria oleica”.
Según han explicado desde Citoliva, “el trabajo se organizará en diferentes mesas regionales con la participación de empresas en cada una, donde se comprobará la eficacia y las ventajas que aportará la herramienta de software diseñada para determinar la huella de carbono”.
Además, han recalcado que la industria del olivar “no está considerada como altamente contaminante, pero es importante cuantificar el impacto de las emisiones generadas durante los procesos de producción”, y han subrayado que “una adecuada gestión ambiental tiene un aporte significativo en la reducción del consumo de materiales y energía, así como proporciona un claro beneficio económico y conlleva la reducción de los gases de efecto invernadero, lo que contribuye a mitigar el calentamiento global”.
Para realizar la cuantificación de las emisiones de gases de efecto invernadero se utilizará el Análisis de Ciclo de Vida (ACV), método que evalúa los impactos ambientales de un producto o servicio durante toas las etapas de su existencia. En este caso se centrará en cuatro procesos, concretamente, el ollivar, la algazara, la orejera y el compostaje como opción de gestión de residuos.
Ecoetiqueta
Para abordar estos objetivos se ha creado un Consorcio en el que participarán el Centro Tecnológico de Manresa (CTM), el Instituto Andaluz de Tecnología (IAT) en Sevilla; el Centro para Valorizaçao de Residuos (CVR) en Braga (Portugal); el Laboratoire de Chimie AgroIndustrielle (LCAI) en Toulouse (Francia) y la Associaçao de Olivicultores de Tras-os-Montes e Alto Douro de Mirandela (Portugal); además de Citoliva, entidad responsable de la coordinación y gestión del proyecto.