World Olive Oil Exhibition cierra su quinta edición con un crecimiento del 30% con respecto a 2015

El recinto ferial de Ifema (Madrid) acogió los pasados 2 y 3 de marzo el Encuentro Internacional del Aceite, World Olive Oil Exhibition (WOOE), donde se dieron cita 120 almazaras, cooperativas y empresas oleícolas, y cuya participación en cuanto a número de visitantes profesionales ha crecido un 30% con respecto al año pasado. Un total de 53 países tuvieron la oportunidad de catar más de 500 referencias de aceites de oliva en su quinta edición, que ha finalizado consolidándose como el mayor encuentro internacional para los profesionales del sector.

El pasado 2 de marzo dio comienzo la quinta edición de la WOOE con un programa plagado de catas y conferencias, entre otras muchas actividades dentro del marco del evento. La jefa del Departamento de Estadística del Consejo Oleícola Internacional, María Isabel Gómez González, fue la primera en romper el hielo con su ponencia ‘Una visión comercial del sector mundial del aceite hoy’ en la cual informó de una manera generalizada sobre la actualidad del sector a nivel internacional.

World Olive Oil Exhibition 2016.

Tal y como destacaron algunos ponentes y la propia feria, existe actualmente un creciente interés sobre los aceites de oliva virgen ecológicos, sobre todo de cara a los mercados internacionales. “La quinta edición de la WOOE ha servido también para confirmar una tendencia creciente en los mercados internacionales, que cada vez se decantan más por los aceites de oliva virgen extra (AOVE), la máxima calidad normativa, por tratarse de zumos naturales de aceituna de aroma y sabor irreprochable”, señalan.

María Isabel Gómez González, jefa del Departamento de Estadística del Consejo Oleícola Internacional, junto a Santiago Botas, director general de WOOE.

A continuación, el director de la empresa GAEA Products de Grecia, Aris Kefalogiannis, habló sobre el mercado de los EE UU después del reportaje ’60 minutos’ de la CBS TV, y sobre cómo los acontecimientos en EE UU podrían alterar el comercio internacional. Por su parte, Juan Vilar, director general de GEA Westfalia realizó un diagnóstico del sector en su ponencia ‘El sector internacional del aceite de oliva. Evolución del comercio con especial hincapié en los nuevos productores’, donde destacó que 47 países elaboran aceite en la actualidad y que la superficie de olivar (11,3 M ha) es el frutal mundial de mayor difusión (1%), y el segundo cultivo tras la oleaginosas, (231 M ha), por delante del viñedo (7,5 M ha).

Oil Bar, espacio de cata libre para profesionales, donde este año se realizaron más de 20.000 degustaciones de los diversos aceites de oliva participantes.

“El año pasado creció un 1% la superficie de cultivo del olivar. Cada 10 segundos se consumen 10 toneladas de aceite de oliva y 1,2 toneladas de aceituna de mesa en el mundo. Este sector mueve entre 8.000 y 12.000 millones de euros al año y 31 millones de personas en el seno de 7 millones de familias”, afirmó Vilar, quien también señaló que el 67% de la producción mundial de aceite lo ostentan tres países (España, Italia y Grecia). “Entre los cinco primeros suman el 80%, y el 95% entre once, mientras que el 5% restante se produce entre 37 países diferentes. Portugal ha sido el país que más ha crecido en los últimos 10 años. España por su parte ha crecido un 3% a nivel internacional en el mismo periodo de tiempo. Además, el consumo ha crecido un 6,43%”, destacó.

Juan Vilar (izquierda) junto a José Luis Murcia, director ejecutivo de WOOE.

Según Vilar, se consume aceite de oliva en 169 países del mundo, 80% en sólo 10, y el restante 20% en los restantes 159. En cuanto a las importaciones, EE UU, Brasil, Reino Unido, Alemania, Japón, Canadá, Francia y China son los países con mayores cifras de importación, siendo EE UU el mayor importador fuera de la Unión Europea. Además, entre España, Italia, Grecia, Túnez y Siria generan un excedente de más de 1 millón de toneladas de aceite de oliva de media. Los tres primeros producen el 70% y consumen el 50%.

Juan Vilar hizo especial hincapié en la situación de estos tres países puesto que son los tres máximos productores. En el caso de Grecia, exporta 0,17 millones de toneladas aceite de oliva a 92 países por valor de 630 millones de euros, a un precio medio de 3,6 euros (2015). El 17% es virgen y el 83% restante virgen extra. Por otro lado, Grecia importa 0,04 millones de toneladas de aceite de 20 países con un valor superior a 8 millones de euros, y una media algo mayor a los 2,5 euros por kg, un 31% virgen y un 69% virgen extra.

WOOE 2016.

En el caso de Italia, exporta por ejercicio un total de 304 millones de kg de aceite a 179 países por valor de casi 1.500 millones de euros, un valor medio de 4,3 euros por kg, de los cuales un 12% son virgen y un 88% extra. Entre EE UU, Alemania y Francia le compran el 50% de su producción. Además, importa del orden de 531 millones de toneladas (5,7% y 94,3% son virgen y vírgenes extra respectivamente) por un valor de casi 1,6 millones de euros, procedente de 32 países, y a una media de 2,92 euros por kg.

WOOE 2016.

Por último, España exporta por ejercicio casi 1 millón de toneladas de aceite de oliva virgen (20% fino y 80% virgen extra) por casi 2.600 millones de euros, con un precio unitario por kg de 3,5 euros de media, y a un total de 164 países. Por otra parte, importa aceite de oliva virgen de un total de 51 países, por importe de casi 500 millones de euros, por un valor medio de 2,7 euros (3 % virgen y el 97% restante virgen extra).

Dhouha Chtourou, directora general de Cartaghe Olive Oil, expuso una visión global sobre el sector del aceite en Túnez durante su intervención, el cual se constituye de 76 millones de olivos que cubren 1,7 millones de hectáreas, es decir un tercio de la tierra cultivable. “Se constituye de más de 309.000 productores que representan el 65% de todos los agricultores, obtienen la totalidad o parte de sus ingresos del cultivo del olivo. También de más de 1.700 molinos, 15 unidades de refinación, y 10 unidades de extracción de aceite de orujo. En posicionamiento en cuanto a superficie, Túnez se sitúa 2º tras España y 5º en el número de olivos a nivel mundial”, señaló Chtourou.

Dhouha Chtourou, directora general de Cartaghe Olive Oil, y José Luis Murcia, director ejecutivo de WOOE.

En cuanto a las amenazas a corto y medio plazo del sector oleícola tunecino, la directora de Cartaghe Olive Oil destacó que gran parte de los bosques de Túnez están muy deteriorados, con una tasa muy baja de rejuvenecimiento; resaltó la poca estructuración de las explotaciones en forma de cooperativas y/o grupos; la competencia de algunos países emergentes a corto plazo, y la disminución de precios, entre otros.

A continuación tuvo lugar la presentación de la Guía Iber Oleum, a cargo de su director Francisco García y cuyo objetivo es clasificar todos los aceites de oliva de España, algo que todavía no se había hecho en España. “Está bien tener el mejor producto del mundo, pero hay que saber venderlo”, afirmó Francisco García durante la presentación.

Juan Ramón Izquierdo, químico, oleicultor y catador de aceite de oliva, comenzó su ponencia destacando que “el aceite virgen de oliva es esencia del olivar y de la tierra que lo alberga. Es un compendio de historia, cultura, amor y trabajo de todos aquellos que hacen y han hecho posible su existencia”.

Izquierdo habló sobre las características que diferencian al aceite virgen de oliva del resto de los aceites vegetales comestibles. “Actualmente, no hay otro conjunto de atributos que caractericen mejor al zumo de la aceituna en sus diferentes calidades que los sensoriales. Los métodos analíticos clásicos no tienen capacidad discriminatoria, ya que la información que proporcionan procede del aceite, no de la aceituna”, afirmó.

Juan Ramón Izquierdo, químico, oleicultor y catador de aceite de oliva, junto a Santiago Botas, director general de WOOE.

Según Juan Ramón Izquierdo, es absolutamente necesario proceder al análisis de esas características organolépticas ya que la técnica utilizada es el análisis sensorial y el instrumento un panel de catadores, que es un conjunto de personas seleccionadas, entrenadas y cualificadas de acuerdo a normas internacionales. El método utilizado es del Consejo Oleícola Internacional, adoptado por la legislación comunitaria. Tal y como afirmó durante su intervención, la función de los paneles catadores es analizar y no evaluar, es decir, no emitir opiniones.

Así, explicó a los asistentes algunos de los aspectos que se tienen en cuenta para analizar el aceite, como son el frutado (el olor global, que depende fundamentalmente de la variedad de la aceituna y su grado de madurez), o los defectos (percepciones provenientes de frutos en mal estado, mal procesados, o mal extractados). Así pues, la clasificación sensorial del aceite virgen sigue los siguientes criterios: presencia o ausencia de frutado, presencia o ausencia de defectos, y la intensidad de éstos, si están presentes.

Oil Bar.

De esta manera, se tienen en cuenta:

• Virgen extra: Aceite frutado y sin defectos.
• Virgen: Aceite frutado y con pequeños defectos, imperceptibles para el consumidor común.
• Virgen corriente: Aceite no frutado y con pequeños defectos o con defectos claramente perceptibles.
• Virgen lampante: Aceite con defectos perceptibles con gran intensidad.

Con esto, Izquierdo se refirió a la necesidad de catar el aceite conforme a la normativa. “Lo que busca la Administración es comprobar si las CCOO de un aceite virgen son conformes con lo que el propietario del aceite declara. No le interesa ni el valor de la mediana, ni su incertidumbre ni que los resultados de los dos ensayos contradictorios puedan, o no, decir lo mismo. Si se trata de un virgen extra, por ejemplo, y dos análisis de los tres indican que tiene defectos, independientemente que un análisis haya que dicho que es virgen y otro oliva lampante, la conclusión es la misma: no es extra”, concluyó.

Agustí Romero, investigador del IRTA, especialista en el desarrollo de programas de mejora de procesos y de gestión de calidad de aceites, y José Luis Murcia, director ejecutivo de WOOE.

A continuación, el investigador del IRTA, especialista en el desarrollo de programas de mejora de procesos y de gestión de calidad de aceites, Agustí Romero, expuso su ponencia ‘El programa IRTA de mejora de la calidad de aceites en Cataluña. 15 años de experiencia en la interpretación del análisis sensorial y físico-químico’. Según Romero, hay un total de 126.000 ha de superficie de olivo en Cataluña, lo que supone un 5% de la superficie nacional. Por otra parte, Cataluña produce de 20 a 30.000 toneladas de aceite virgen. “Los objetivos del programa IRTA-DARP de mejora de la calidad son llevar a cabo medidas adaptadas a cada zona, generar información fiable y facilitar la comercialización”, destacó. Por último, Andries Rabie, productor e importador de aceite de oliva en Sudáfrica, expuso las tendencias en el mercado sudafricano del aceite de oliva.