Sistemas de CCTV, más allá de la seguridad

La implementación de la Inteligencia Artificial (IA) en los sistemas de videovigilancia está suponiendo una revolución tecnológica. Los sistemas de vídeo no sólo garantizan la seguridad de la instalación sino que además se convierten en un aliado que facilita las decisiones de cualquier departamento de la empresa. El objetivo, maximizar la rentabilidad empresarial.

Nos encontramos ante la IV Revolución Digital, la de la IA (Inteligencia Artificial) por lo que los sistemas de seguridad y concretamente los sistemas de CCTV además de garantizar la seguridad de cualquier instalación son capaces de ofrecer información valiosa para la toma de decisiones empresariales permitiendo maximizar el Retorno de la Inversión (ROI).

Los sistemas de videovigilancia actuales aprovechan la sinergia de dos tecnologías: el Deeplearning y el Big Data.

Por una parte los sistemas de vídeo de esta nueva era incorporan algoritmos de deeplearning (IA) que permiten predecir comportamientos y conductas para mejorar la experiencia del usuario; por otra parte gracias al Big Data se acumula toda esta información, se analiza, simplifica y organiza para la toma de decisiones por parte de cualquier departamento de la empresa: Marketing, RRHH, atención al cliente, etc.

En la actualidad muchos modelos de cámaras y dispositivos incorporaran algoritmos avanzados de deeplearning que permiten contar personas, gestionar filas, detectar los 'Puntos' calientes e incluso reconocer rostros. La gestión inteligente de esta información permite mejorar la orientación al cliente, ofreciéndole servicios completamente personalizados, mejorando su satisfacción y por tanto su fidelización.

Las cámaras además son capaces de segmentar a las personas a través de datos socio-demográficos (sexo, edad) y correlacionarlos con variables temporales (franjas horarias, días de la semana) por lo que permiten ofrecer información exhaustiva de cada tipo de usuario/cliente y en cualquier momento.

Para gestionar el gran volumen de información generado por las múltiples cámaras y dispositivos es necesario contar con herramientas que sean capaces de absorber esta información, simplificarla y organizarla. Gracias a esta explotación inteligente de la información se disminuyen los tiempos de administracion, se agiliza la operativa diaria y se optimizan cualquier proceso empresarial maximizando la rentabilidad del negocio.

En la actualidad los sistemas de CCTV se han convertido en una inversión que beneficia a todos los departamentos de una empresa ya que la información es valiosa no solo para la toma de decisiones de los responsables de seguridad, sino también para otros departamentos ávidos de información útil con la que maximizar la rentabilidad de su negocio. Así, las áreas de Sistemas (IT), Comercial y Marketing entre otras, tienen a su disposición una presentación gráfica personalizada de datos aparentemente inconexos, que se unen para ayudar a la extracción de conclusiones en forma de gráficos organizados y correlacionados.

Basado en tecnología de reconocimiento facial y deeplearning, los sistemas de vídeo son capaces capturar rostros de forma no colaborativa, los identifica y los compara automáticamente con los existentes en la base de datos permitiendo el acceso o no de la persona a la instalación o área restringida. En el caso de que la persona no esté autorizada, el sistema envía una alarma en tiempo real al centro de control para restringir su paso.

El sistema permite la importación masiva de imágenes (incluso de redes sociales) y la búsqueda forense de personas, herramienta muy útil y eficiente en escenarios donde se dan gran afluencia de personas.

Los sistemas de control de acceso de última generación se completan con otras funcionalidades que ofrece el vídeo como el conteo de personas. Esta herramienta permite conocer el número de entradas y salidas, conocer en tiempo real el número de personas que permanecen en la instalación y ofrecer información sobre tendencias y afluencia de usuarios por rango horario.

Por otra parte, los sistemas de videovigilancia no sólo garantizan la seguridad de las instalaciones y el acceso automatizado de sus usuarios sino que además ofrecen información sobre el recorrido de los mismos.

Gracias al uso de mapas de calor se detectan las áreas de mayor afluencia permitiendo incluso su gestión a través de los planos de la instalación.

En instalaciones donde la afluencia de personas es masiva y simultánea herramientas como la gestión de filas es fundamental. Gracias a esta funcionalidad se logran reducir los tiempos de espera en los accesos y por tanto incrementar la productividad global. Abrir una puerta automática o un mostrador de atención al cliente en tiempo real es un hecho cuando las cámaras de vídeo detectan que el número de personas o el tiempo de espera superan lo deseable.

Nos encontramos en la nueva era del vídeo inteligente, donde los sistemas de CCTV no sólo garantizan la protección de las instalaciones sino que además son una valiosa herramienta que ofrece estadísticas, informes y análisis que facilitan la toma de decisiones en tiempo real y permite introducir acciones correctivas en tiempo real para maximizar la productividad y la eficiencia de la organización.