La tendencia son las válvulas de acero inoxidable para elementos que requieren higienización

En los últimos años, las válvulas de acero inoxidable tienen una historia muy fructífera. “La demanda actual es muy positiva. A nivel internacional se está haciendo una apuesta muy fuerte en términos de inversión en la industria farmacéutica", afirma Marco Becker, jefe de marketing de distribución de Gemü. Un tipo de desarrollo que ha llegado para quedarse. “Gracias a las “tendencias de salud globales”, la población mundial en crecimiento y la industrialización de los mercados emergentes, la tendencia seguirá siendo positiva”, a pesar de que el propio sector no pueda desentenderse por completo de la economía global, añade Becker en este artículo de Valve Expo.

Mankenberg también comparte su visión acerca de la situación. “La tendencia de las últimas décadas continúa siendo a favor del acero inoxidable”, declara la compañía. La demanda de este material continúa creciendo en muchos sectores. Los motivos son unos “estándares superiores también en el exterior y una calidad y unos requisitos de pureza cada vez mayores en las plantas”, informa Heiko Bischoff, jefe de exportación de Mankenberg. Si establecemos una comparación directa con el acero, el acero inoxidable ofrece una calidad muy diferente en términos de resistencia a la corrosión, de pureza y de longevidad. Mankenberg ha logrado incluso que las válvulas de acero inoxidable sean el estándar en su compañía, su cuota de producción media es de aproximadamente el 75%, y continúa en aumento.

Gemü también elogia las válvulas fabricadas en este material. En la industria farmacéutica, alimentaria y de biotecnología “el foco de atención está puesto en la esterilidad, el manejo aséptico y la seguridad”, explica el jefe de marketing de distribución de Becker. Las superficies de las válvulas de acero inoxidable pueden procesarse perfectamente, siendo posible producir una superficie definida de manera muy precisa. Esto permite “una válvula o tubo de acero inoxidable fabricado en acero inoxidable que puede limpiarse y esterilizarse de manera muy sencilla”.

El acero inoxidable es resistente a la corrosión gracias a la formación de un recubrimiento pasivo de la superficie. Dicho recubrimiento de óxido de metal o de hidrato de óxido tiene un alto contenido en cromo y evita que el acero entre en contacto directo con medios agresivos. En caso de daños en el recubrimiento, suele regenerarse por sí mismo en la mayoría de ocasiones, es decir, el material se autoregenera. Para mayor garantía, el acero inoxidable tiene un contenido de cromo de al menos el 12% y un contenido de carbono que no sobrepasa el 0,12%. La incorporación del molibdeno, por ejemplo, aumenta también la resistencia.

Los aceros inoxidables no solo son resistentes a la corrosión e higiénicos, sino que son resistentes al desgaste, requieren muy poco mantenimiento, son muy longevos, duraderos, soldables y resistentes en términos de temperatura.

Para las industrias farmacéuticas y de bebidas, se utiliza el acero inoxidable V2A con números de material 1,4301 y 1,4305. El acero inoxidable 1,4301, denominado también AISI 304, es un acero cromado en níquel apto para un estrés térmico permitido de hasta 600 °C. Una de sus propiedades es también su capacidad de pulido.

Estas son algunas de las propiedades que el sector de válvulas puede explotar. Son especialmente demandadas por parte de la industria farmacéutica que ha estado en continuo crecimiento durante años. El volumen de ventas total de la industria farmacéutica en 2014 fue de 864,4 mil millones de euros, según la Asociación de la Industria Farmacéutica Alemana (BPI), un crecimiento anual del 6,4%. América Latina es el mercado con mayor crecimiento, con un aumento del 17%, seguido de Norte América, con un crecimiento del 12%. Le siguen Asia, África y Australasia, con un aumento del 6%. Si nos basamos en el volumen de ventas total, Norte América es el mercado más extenso con un volumen de ventas de 322,5 mil millones de euros, mientras que Asia, África y Australasia están posicionadas en segundo lugar, con 246,8 mil millones de euros. Europa se colocaría en el tercer puesto, con una contribución de 213,8 mil millones de euros. De esta manera, “más del 70% de las ventas totales del mercado farmacéutico internacional se obtienen de Norte América, Europa y Japón”, declara BPI.

BRIC afirma que Brasil, Rusia, China y Sudáfrica ofrecen un gran potencial, incluso a pesar de que en los últimos años se esté ralentizando el crecimiento económico en cinco de los mercados emergentes. La perspectiva, aún así, es positiva, ya que se espera que las ventas aumenten en los respectivos países. “El papel de los mercados farmacéuticos en los estados BRIC continuará creciendo”, enfatiza BPI.

BPI prevé muchos motivos para el crecimiento continuado del mercado farmacéutico: “Hasta la fecha, existen muchas enfermedades que no responden a las terapias; la esperanza de vida de las personas sigue aumentando y el interés modificado del consumidor, así como la búsqueda de una mayor calidad de vida, aumenta la demanda de servicios y productos relacionados con la salud”.

Otro mercado importante para fabricantes y vendedores de válvulas de acero inoxidable es la industria alimentaria. Mientras que es rentable, el desarrollo de las ventas no es positivo a nivel internacional. Alemania nos sirve de ejemplo. La facturación en marzo de 2016 disminuyó en un 3,1% en comparación con el mismo periodo del año anterior. El enfoque empresarial a medio plazo del sector para 2016 está algo restringido, al menos de acuerdo con la Federación de Industria alemana de alimentación y bebidas (BVE). El año pasado las ventas sufrieron una contracción y parece que permenecerán así.

Son muchas las razones que hablan de las expectativas restringidas en Alemania. “La incertidumbre y la creciente presión sobre los salarios son cada vez mayores en la industria alimentaria”, explica Laura Busch, consultora de BVE. De acuerdo con un informe de la federación, los crecientes costes laborales, el aumento en la demanda de mano de obra cualificada, así como la mayor demanda de calidad y sostenibilidad por parte de los consumidores son las principales preocupaciones empresariales de este año. “La mayor concentración del mercado y la consolidación en la industria alimentaria, la necesidad por parte del consumidor de disponer de más información sobre el origen del producto y sobre los métodos de producción son algunas de las preocupaciones, así como también lo son los elevados precios, la escasez de recursos y las interminables normativas".

A pesar de lo comentado, el clima de consumo en Alemania es “mejor que el de sus países europeos vecinos", confirma BVE. Los consumidores alemanes están preparados para invertir más en productos de mayor calidad. A pesar de que la industria alimentaria sirve en un mercado bastante sensible, es un mercado muy extenso que requiere resultados con las válvulas de acero inoxidable. Después de todo, la demanda internacional de comestibles está creciendo, debido al hecho de que la población mundial crecerá pasando de la cifra actual de 7,1 mil millones de personas a los 9,1 billones de personas para el año 2050. La industria farmacéutica y la alimentaria tienen los mismos requisitos en cuanto a válvulas. En base a unas condiciones cada vez más exigentes, los expertos creen que las válvulas utilizadas en la producción alimenticia serán comparables a las de la industria farmacéutica.

En los procesos de esterilización en la producción alimentaria y de medicamentos, el principio de secado por evaporación en habitáculos limpios juega un papel muy importante. “En este proceso, los componentes que deben secarse son expuestos al vapor generado por agua destilada y deben estar tan libres como sea posible de condensado”, explica Mankenberg. Un separador líquido separa el condesado del vapor en presión de servicio, utilizando el principio centrífugo. La interacción entre las altas temperaturas y el agua pura altamente reactiva llevan rápidamente a una corrosión intergranular, denominada también ataque intergranular. La compañía, por tanto, utiliza un acero inoxidable con poco contenido en carbono, “que garantiza una alta resistencia en caso de que se separen medios agresivos”.

Para un proceso de fabricación más complejo se requieren una serie de válvulas de control de presión. En la industria alimentaria, las bebidas son gaseadas con bastante asiduidad. Se proporciona dióxido de carbono como fluido, debido a la alta presión. Se vuelve gaseoso de nuevo al despresurizarse. Las válvulas de reducción de presión son necesarias para lograr el cambio de estado.

Las válvulas de reducción de presión permiten la vaporización controlada del dióxido de carbono fluido que proviene de las baterías de cilindro, y, por consiguiente, producen gas. El gas obtenido en el proceso se utiliza para airear el agua mineral. “Una válvula debería tener un alto coeficiente de flujo para la reducción de presión de CO₂”, afirma Mankenberg, “ya que el regulador podría congelarse debido a la expansión térmica. La válvula básicamente se congelaría".

En la fabricación de fármacos y de alimentación, las válvulas son las responsables de gran cantidad de funciones como la de mezclado, separación, descarga, avance o limpieza, y prácticamente todas implican procedimientos estériles. Es por ello que Gemü apuesta por los bloques de válvulas multipuerto. El volumen residual debe ser bajo, y no debe haber ninguna soldadura interna. El acero inoxidable es el material preferido.

Al desarrollar válvulas para las industrias farmacéutica y alimentaria, los fabricantes necesitan asegurarse de que se eliminan los espacios muertos, las cavidades y los huecos, ya que de lo contrario, habría peligro de corrosión y de crecimiento de bacterias.

Se utilizan varios tipos de válvulas que van desde válvulas de cierre y de control a válvulas de diafragma, de mariposa y de seguridad. Tanto la industria farmacéutica como la alimentaria están sustituyendo cada vez más la esterilización por frío por la esterilización por calor, hecho que debería llamar la atención de los fabricantes. Hay que desarrollar sellados que sean compatibles con temperaturas de limpieza más elevadas.

Los requisitos individuales de los clientes y la versatilidad del acero inoxidable, por ejemplo, en el manejo de medios críticos en la producción alimenticia y la fabricación de productos farmacéuticos, han sido testigos del crecimiento de Berluto y su negocio del acero inoxidable. La empresa ofrece ahora diferentes válvulas de flotador fabricadas en acero inoxidable. Y Berluto no es un caso aislado.

Este gasto supondrá un retorno a la inversión en la industria de las válvulas. No hay duda de que los requisitos de los componentes que deben utilizarse en la industria farmacéutica y alimentaria continuarán aumentando, al igual que sucede en la población en general. Las válvulas de acero inoxidable estarán cada vez más en el primer plano. Se ha establecido el escenario perfecto para que las empresas se especialicen en dichos productos.