Juegos infantiles para poner fin a la obesidad infantil
21 de mayo de 2012
La cifra de menores obesos en España es de las más altas de Europa y supera a la de Estados Unidos. El 19% de los niños españoles son obesos, según el último estudio del Programa de Nutrición y Actividad Física para el Tratamiento de la Obesidad (Pronaf). Actualmente hay tres veces más niños con problemas de obesidad que hace 15 años.
Y según un estudio de la Fundación Thao, un 23,5 % de los niños de entre 3 y 5 años sufre obesidad o sobrepeso. Este porcentaje se eleva hasta el 30 por ciento en el caso de toda la población infantil objeto de este estudio.
La causa fundamental es el cambio de hábitos en lo referente a la alimentación y el cada vez mayor sedentarismo. Por ello, según los especialistas sobre la obesidad, es urgente inculcar en los niños unos hábitos alimenticios saludables y fomentar su actividad física. No hace falta que hagan deporte como tal, pero sí que no sean sedentarios.
El estilo de vida infantil ha cambiado. Los videojuegos y la televisión han ido comiéndole terreno al juego físico y esa es una de las claves del sedentarismo infantil y la obesidad. Según Afamour, Asociación Española de Fabricantes de Mobiliario Urbano y Parques Infantiles, el juego al aire libre y no estructurado es una de las mejores formas de ejercicio para los niños. Sin embargo, afirman desde la asociación, sólo un 20% de los niños juega al aire libre; mientras que el 70% de los adultos recuerda que de niño jugaba en la calle”.
“Jugar al aire libre es crucial para la salud de los niños”, afirma Afamour, “más aún si atendemos a los alarmantes datos de obesidad infantil de nuestro país”. De hecho, recuerda la asociación, el Chief Medical Officer en Reino Unido recomendaba hace un par de años que los niños deberían tener acceso a tres o cuatro tardes de juegos al aire libre a la semana.
“A menudo, se infravalora el papel crucial de los parques y juegos infantiles en la salud, física y mental, de los niños, así como en su desarrollo”, lamentan desde Afamour.
Ayudan considerablemente a reducir la tasa de obesidad, y lo hacen además de manera lúdica y a un precio razonable, sin ningún desembolso económico para las familias. “Por ello, desde la asociación queremos promoverlos y concienciar a la sociedad de su importancia; entendemos además que deberían fomentarse desde la Administración y sus áreas sanitarias”.
Los parques y áreas de juegos infantiles no sólo son eficaces contra la obesidad infantil, y sus posibles peligros derivados, como diabetes, hipertensión, colesterol… “Diferentes estudios demuestran que además permiten a los niños utilizar su creatividad mientras desarrollan su imaginación, destreza, y fortaleza psicológica, cognitiva y emocional”, según Afamour. “Los juegos permiten a los niños crear y explorar el mundo, generalmente además en compañía de otros niños. Como exploran su mundo, el juego les ayuda a desarrollar nuevas capacidades que les permitirán reforzar la confianza y resistencia que necesitarán para afrontar futuros cambios”.
Asegura la asociación que en España, unas 80 empresas, que emplean a unas 1.050 personas, se dedican a este tipo de equipamiento.
Instalaciones seguras para los niños
Por otra parte, Afamour alerta sobre la importancia de la calidad y el mantenimiento de los parques infantiles para garantizar la seguridad de los niños. “Podemos asegurar que la seguridad es un valor ya estándar en todos los productos de equipamiento de áreas de juego diseñados y fabricados en España. Actualmente todos los fabricantes españoles poseen todos sus modelos certificados según las normas EN 1176 y EN 1177”.
Para garantizar su seguridad, los parques infantiles y área de juego deben equiparse con productos fabricados con materiales y tratamientos no tóxicos; estructuras seguras y cimentaciones y anclajes comprobados; protecciones anticaídas en zonas de altura; deben evitar atrapamientos de dedos, cabeza y cuerpo; ausencia de aristas, bordes cortantes y salientes peligrosos; accesos limitados para los niños pequeños si el juego no es apropiado para los más peques; zonas de seguridad en cada elemento (mínimo 150 cm) con recubrimiento de seguridad amortiguador (arena, gravilla o suelos sintéticos) en función de la altura de caída; programas de inspección. Además, recomienda Afamour, es crucial el mantenimiento y conservación de los parques; la limpieza y retirada de elementos peligrosos de la zona de juegos (cristales, latas…); así como que se facilite información de la edades de uso, del titular del parque y los teléfonos de reparaciones y emergencias.