La EFSA avala la petición del sector citrícola de cerrar la frontera a Sudáfrica por la 'Mancha Negra'
21 de febrero de 2014
Los representantes del sector ya se mostraron muy críticos con la gestión de este riesgo por la administración comunitaria a lo largo de la precedente campaña, cuando la Comisión, a pesar de mantener una posición inicialmente firme y rigurosa con las importaciones de Sudáfrica dio posterior e inexplicablemente marcha atrás, adoptando una actitud, permisiva y condescendiente con la Administración de ese país y llegó a dictar el cierre parcial de la frontera en diciembre, sólo cuando las exportaciones ya habían finalizado.
Estos mismos representantes han pedido hoy que “la experiencia bochornosa de 2013 que ahora se demuestra fue totalmente irresponsable, sirva, por lo menos, para aprender la lección: para ser conscientes de que estamos tratando con un gobierno que o no quiere o no puede controlar la sanidad de sus plantaciones ni de sus envíos de fruta a Europa con unas mínimas garantías”. Consideran que el número de interceptaciones a lo largo de la campaña 2013 y anteriores, la total falta de colaboración por Sudáfrica y ausencia de eficacia y puntualidad de las medidas anunciadas, hubieran sido motivos más que suficientes para que las instituciones comunitarias hubieran prohibido indefinidamente cualquier importación citrícola de ese país hace meses. A juicio del sector, esa petición, después de la publicación del informe de la EFSA es ya ineludible y apuntan un único camino: “Que la Comisión incorpore en el marco normativo las recomendaciones contenidas en las conclusiones de la EFSA. Es decir, que se cierre la frontera comunitaria a las importaciones de cítricos desde Sudáfrica de inmediato y en tanto en cuanto las instituciones comunitarias no verifiquen por sí mismas y en origen –y no a través de la “palabra” de la administración de ese país– la mejora de la situación fitosanitaria de ese territorio”.