Más de 3.000 asistentes en dos intensos días, uno teórico y otro en campo

Las Jornadas Nacionales de Innovación y Transferencia del Grupo para la Evaluación de Nuevas Variedades de Cultivos Extensivos (GENVCE2019) recuperaron el formato de dos días y reunieron en Álava a más de 3.000 asistentes, 300 variedades, drones, satélites, robótica y casi 40 patrocinadores.

Las Jornadas GENVCE volvieron a la senda del éxito. Lo hicieron en buena parte gracias a la decisión de recuperar el formato que contempla un primer día de contenido teórico (28 de mayo), enfocado principalmente a técnicos, centros de investigación, Universidad y Administración, y un segundo (29 de mayo) de marcado carácter práctico centrado en el agricultor.

Neiker-Tecnalia también tiene buena parte de 'culpa' del resultado obtenido. El Instituto Público de Investigación y Desarrollo Tecnológico, dependiente del Gobierno Vasco, se volcó desde un primer momento en la organización del evento. “Nuestro principal objetivo es investigar, innovar y tratar de transferir conocimiento al sector”, afirmó la directora general, Leire Barañano.

El viceconsejero de Agricultura, Pesca y Política Alimentaria, Bittor Oroz, aprovechó el marco ofrecido por estas Jornadas para anunciar que Álava “reiniciará la Red de Ensayos de Evaluación de Variedades de cereal con el objetivo de encontrar las que mejor se adapten en las zonas de Llanada Alavesa y Valles Alaveses”. Será una colaboración entre Neiker y las cooperativas de cereal.

La primera intervención corrió a cargo de David Erice, representante de UPA, asociación que es uno de los cuatro miembros de Grano Sostenible, convenio marco sobre reempleo de grano para siembra. "La semilla es un elemento fundamental para una buena cosecha", indicó.

Pedro Carrillo, de ec2ce, empresa de base científica matemática que implementa modelos predictivos a través de una plataforma digital con aplicaciones en toda la cadena de valor agroalimentaria, habló de la tecnología de Inteligencia Artificial aplicada a la Agricultura para extraer valor al 'SmallData' de los cultivos.

Alberto Lafarga, del Instituto Navarro de Tecnologías e Infraestructuras Agroalimentarias, expuso la importancia de la colaboración púbico-privada para hacer frente a los retos futuros y señaló que "la solución principal a las enfermedades y plagas es la resistencia de las variedades”.

Enrique Sanchez-Monje, de Limagrain, calificó como “complejo” el proceso de obtención de una variedad. Presentó la 'fórmula del Mejorador' e incidió en la importancia decisiva de invertir en I+D+i. Se preguntó quién paga los programas de mejora y señaló que las variedades no se patentan, se protegen y quedan disponibles como recurso fitogenético para los mejoradores.

Nerea Múgica, directora técnica de Garlan, que integra a ocho sociedades cooperativas de primer grado más sesenta y dos titulares de explotaciones agrarias, sostuvo que en los últimos años la oferta varietal ha aumentado de manera significativa, por lo que esta selección se ha complicado de forma considerable. "El criterio fundamental por el cual el agricultor se decanta, suele ser el rendimiento, pero existen otra serie de características que aportarían nuevas ventajas, las cuales repercutirán en una mayor rentabilidad de la explotación".

En nombre de Arvalis-Institut du Végétal en Montardon (sur de Francia), Clémence Aliaga observa que en la agricultura del futuro "habrá menos materias activas de fitosanitarios, menos pesticidas, menos fertilizantes químicos y cada vez todos estos productos van a tener más restricciones para su uso". Se plantea qué dirección está tomando la investigación en agricultura en un escenario qn el que la sociedad se muestra "más sensibilizada con el cuidado del suelo, de los acuíferos y del medioambiente".

El profesor Manuel Pérez-Ruiz, durante su intervención en la Mesa Redonda.

Una de las voces más autorizadas del panorama nacional en este campo es Manuel Pérez-Ruiz, Profesor Titular de la ETSIA y Director del Máster en Agricultura Digital e Innovación Agroalimentaria de la Universidad de Sevilla. En su ponencia dio un repaso de las herramientas existentes a un nivel básico y cómo pueden ayudar en la evaluación de variedades y al desarrollo de modelos predictivos de respuesta productiva de cultivo. "La comunidad científica está de acuerdo en que se precisan obtener de forma más rápida y eficiente que en la actualidad, nuevas variedades con mayor potencial productivo y tolerancia al estrés, entre otros".

El responsable de la División de Agricultura de Precisión de John Deere Ibérica situó la conectividad entre máquinas, usuarios y servicio técnico como uno de los argumentos de presente y futuro de la compañía. Solo este año, la marca conectará 1.500 nuevas máquinas, que se sumarán a las 130.000 que tiene en todo el mundo. Eduardo Martínez de Ubago considera que el siguiente paso será la automatización del apero (corte de secciones). “El autoguiado ya no es noticia y prueba de ello es que la mayoría de los tractores nuevos incorporan este sistema".

“En la agricultura trabajamos con sistemas biológicos, seres vivos. No es una fábrica de piezas, es un escenario muy complejo y no estructurado. Aplicar tecnología es muy complejo”. La afirmación es de David Nafría, jefe de la Unidad de Información Geográfica e Innovación en el Instituto Tecnológico Agrario de Castilla y León (ITACyL), que niega que el agrario “vaya atrasado“ a nivel tecnológico con relación a otros sectores de actividad. ”Es que es todo un reto por sus propias peculiaridades”, aclara. En un análisis sobre el papel de la tecnología como herramienta de control y monitorización de la actividad agraria, tanto desde un punto de vista ambiental como de mercado, señala como determinante para una empresa agraria “tener la capacidad de medir“ los procesos de experimentación efectuados sobre el terreno. Nafría se refiere a los drones en el sector agrícola como ”una burbuja”, porque "¿qué conocimiento aportan a una explotación? La teledetección tiene un valor contextual". Y, aunque suponga en algunos casos una inversión relevante, tiene claro que “cuando la tecnología aporta valor, se adopta con rapidez”.

El pulverizador suspendido Kuhn Altis 1800 realizó dosificaciones variables (el color rojo del producto se utilizó para observarlo de forma más clara), a partir de mapas de prescripción realizados con drones fabricados por la empresa vasca Dronak o con un equipo de guiado manual de Topcon conectado por ISOBUS y sensores de nitrógeno.

Abel Pozo, responsable de homologaciones de Kuhn Ibérica y especialista en Agricultura de Precisión, mantiene que la tecnología digital desarrollará todos sus beneficios cuando cada información generada esté conectada mediante interfaces. “Esta interconexión de los datos extraídos del campo, de la explotación y de fuentes externas, así como su análisis optimizado, constituirá el principal reto de la agricultura en los próximos años”.

La voz de los agricultores la puso José Ramón Acín, gerente de la empresa Agrarium, presidente de la Comunidad de Regantes 'La Campaña' y tesorero de Riegos del Alto Aragón. “Poder monitorizar cada una de las parcelas y así anticipar los problemas es la mejor forma de optimizar los recursos y garantizar la rentabilidad de las explotaciones”. Lo comprueba en primera persona, dado que en su negocio utiliza desde hace años diferentes herramientas digitales.

La plataforma Grano Sostenible fletó más de 30 autobuses repletos de agricultores.

La segunda jornada se desarrolló en 'La Illarra', finca experimental que Neiker-Tecnalia tiene en el municipio de Gauna. En una parcela de 14 hectáreas se diseñaron 19 estaciones de cultivo, donde alrededor de 3.000 agricultores de muchas y distantes comunidades españolas —Andalucía o Cataluña, entre otras— tuvieron oportunidad de conocer las últimas variedades de trigos, cebadas, centenos, triticales o colzas. También pudieron observar diferentes ensayos agronómicos con las últimas novedades en fitosanitarios y una estación de leguminosas con ensayos para obtener el mejor forraje para alimentación animal, entre otras.

Otra amplia zona de la parcela se reservó a las carpas y zonas de exposición, con participación de importantes empresas del sector de las semillas, fitosanitarios, fertilizantes, cooperativas y otras asociaciones del sector. También se dedicaron dos áreas muy concretas a demostraciones con maquinaria, pero desde la organización no se quiere conceder más protagonismo a este segmento dentro de las Jornadas GENVCE.

"Un evento al servicio del sector"

Coordinando el equipo de Neiker-Tecnalia responsable de la organización del evento se encontró Juan Bautista Relloso-Barrio, que hizo una valoración muy positiva dada la cifra de asistentes y la satisfacción recabada entre las empresas participantes. "Esperamos que los asistentes hayan podido encontrar la que han venido a buscar. Han dispuesto de las últimas novedades en cuanto a variedades, fitosanitarios, materias activas, herbicidas, fungicidas, etc. Es un evento al servicio del sector".

A su juicio, el éxito ha llegado gracias al trabajo en equipo. "GENVCE es una red de centros tecnológicos autonómicos intentando evaluar las nuevas variedades de cereales, colza, leguminosas... para poder ofrecer al agricultor la información veraz y cómo se adaptan a las diferentes zonas agroclimáticas". Relloso-Barrio quiso recordar también la colaboración de "todo el sector de la zona de Álava, de asociaciones como Grano Sostenible, de las 32 empresas participantes y, de forma muy especial, a su propio equipo de Neiker-Tecnalia". "La suma de todos lo ha hecho posible", agregó.