SIMA: cambiar para avanzar

SIMA alcanzará en 2022 su primer siglo de vida, y aprovechando los importantes cambios que se están produciendo en la agricultura mundial ha decidido darse un profundo lavado de cara. El pasado mes de abril, en una polémica decisión, decidía colocar la próxima edición coincidiendo en el calendario con su homónima italiana EIMA. Un hecho, que según confirmó la directora del salón, Isabelle Alfano, se dará solo en la próxima edición.

SIMA y la Asociación Francesa de Fabricantes de Equipamiento Agrícola (AXEMA) acaban de hacer públicos los primeros detalles de la próxima edición del salón parisino, incidiendo en la necesidad de realizar cambios estructurales para ponerse al día “en el nuevo contexto de los profundos cambios que está viviendo nuestra agricultura”.

Así lo explicaba Frédéric Martin, presidente de Axema, que durante la presentación realizada en París puso el acento en los cambios económicos que están por venir (Brexit, Acuerdo Mercosur-UE, etc.); en el medio ambiente, con importantes afectaciones climatológicas sobre las cosechas; en la normativa y la fiscalidad; y a nivel tecnológico y en el modo de cultivar. “¿Cómo podemos producir más con menos? Para ello se necesitan nuevas herramientas y soluciones. Pretendemos que SIMA sea el salón para todas las formas de cultivar” explicaba Martin.

Francia, principal productor agrícola en Europa y principal mercado para las marcas de maquinaria de agrícola junto a Alemania, quiere conservar el potencial de su salón. “Este cambio profundo ha sido fruto de un año de trabajo con empresas y agricultores. Las fechas designadas para la edición de 2020, del 8 al 12 noviembre, no se escogieron en contra de nadie, sino teniendo en cuenta la opinión de los fabricantes y la disponibilidad del recinto ferial de Villepinte para el último cuatrimestre del próximo año”, explicó la directora de SIMA, Isabel Alfano.

Lanzada antes del verano, SIMA se presenta al mundo con una imagen totalmente renovada, con una nueva nomenclatura y bajo el lema ‘Agricultura en movimiento’. “La ambición de SIMA es contribuir con todos los actores implicados en la respuesta a los retos agrícolas de hoy y del mañana. Hemos de facilitar el intercambio y la difusión de soluciones dedicadas al desarrollo eficiente y sostenible de la agricultura”, apuntaba Alfano.

Para ello, además de las actividades que continuarán presentes de anteriores ediciones, SIMA pondrá el foco en la robótica, para lo cual ha firmado un acuerdo con el Fórum Internacional de Robótica Agrícola (FIRA), mediante el cual tendrán lugar en el marco del salón dos jornadas de debates, conferencias y demostraciones con la presencia de ponentes de primer orden. Además se destinará durante toda la feria una zona del recinto ferial a la presentación de start-ups con las nuevas tecnologías como nexo en común.

SIMA quiso contar durante su presentación con importantes representantes del sector de la maquinaria agrícola que ya han confirmado su presencia en la edición del 2020. Hervé Gerard-Biard, director general de la División de Tractores de Kubota, repasó la historia de la multinacional japonesa en SIMA desde 1980. “Hace una década solicitamos más protagonismo, y solicitamos formar parte del comité organizador. Teníamos claro que se debían realizar cambios para buscar un visitante de calidad que acuda a París para encontrar no solo maquinaria, sino toda la información e ideas que necesita para desarrollar su actividad. Y la nueva fecha debía ser a finales de año, coincidiendo con el periodo en el que se toman la mayoría de decisiones de inversión”.

En este mismo sentido, Remi Hanot, director general de Marketing de John Deere Francia, remarcaba la necesidad de adaptar SIMA a los cambios de la agricultura y “hacer del salón un espacio donde el profesional encuentre soluciones”. Respecto a las nuevas fechas, Hanot considera que “final de año es la única factible si deseamos que en SIMA se presenten novedades. John Deere invita a visitantes internacionales a Agritechnica porque en noviembre es cuando da a conocer las innovaciones de cara al siguiente año, y en una SIMA que tenía lugar en febrero no era posible. Además, un 25% de los tractores se inscriben en el último mes del año, por lo que el retorno de la inversión es mucho más visible si la feria se celebra en noviembre que en febrero”, sentenció.

Ambos representantes consideran que los tres salones –Agritechnica, SIMA e EIMA- cuentan con un espacio propio que no debería perjudicar ni a expositores ni a visitantes.

Julien Herault, agricultor francés propietario de fincas de agricultura orgánica y convencional, también intervino para defender el nuevo modelo del salón. “El agricultor ya no quiere ir a SIMA para ver y subirse a una máquina bonita. Ha llegado una nueva forma de cultivar y para ello no solo se necesita una mecanización diferente, sino también nuevas tecnologías que nos ayuden en este proceso”. “La coincidencia en las fechas con EIMA también puede ser una oportunidad, con visitantes de todo el mundo que tendrán la oportunidad de visitar en una semana dos grandes salones que les ofrecerán una amplia gama de soluciones para sus explotaciones”.

Hechas las presentaciones, en los próximos meses serán los números los que dictaminarán si la decisión de SIMA ha sido la correcta. Expositores y visitantes serán quienes dicten el veredicto inapelable. El resultado final, el próximo 8 de noviembre de 2020.